jueves, 1 de mayo de 2008

los amores viejos nunca mueren

Llévame como una rosa sobre tu pecho
por la tierra y el mar
el verano y el invierno
como una rosa viva sobre tu pecho.

Armadura de sede
breve escudo de sueño
en el día del canto
en la noche de miedo.

No importa que una tarde
me deshoje en el viento
te quedará un perfume
por siempre dentro del pecho.

No hay comentarios: